Es importante realizar un análisis crítico de la información encontrada y seleccionar las fuentes de calidad. El tribunal que evaluará tu trabajo lo tendrá en cuenta.
Documentos impresos
¿Quién es el autor? ¿Es especialista en la materia? ¿Cita las fuentes de información que ha utilizado? ¿Se trata de un libro o una revista revisada por expertos?
Páginas web
¿Quién ha escrito la página? ¿El responsable es un autor, una institución, una empresa...? ¿Está claramente identificado? ¿Ofrece información sobre sí mismo: e-mail, dirección de contacto, etc.?
¿Cuándo fue creada la información? ¿Está actualizada?
Busca la fecha de publicación del libro, artículo de revista o página web. Es importante saber si lo que has encontrado es aún relevante para tu tema de investigación.
¿El contenido es apropiado al tema que has elegido? ¿Es información de calidad? ¿Es información avalada por metodología científica o académica? ¿Está contrastada? ¿Está bien organizada? ¿Está bien escrita?
¿Es la información objetiva e imparcial, completa, exacta? ¿Contiene opiniones, comentarios sesgados, etc.? ¿La información parece válida y bien investigada? ¿Aparecen referencias o enlaces que te llevan a información últil o que verifican las opiniones?
"Evaluación de la información". Vídeo de la Universitat Oberta de Catalunya